Hoy os traemos la boda de Natalia y Juande, que tuvo lugar el pasado 30 de julio de 2022 en el pueblecito de Herencia, en la Iglesia Inmaculada Concepción.
Al finalizar la ceremonia, nos fuimos hasta los Salones Mabel, en los jardines del Alcazar de San Juan, donde tuvieron lugar el banquete y la fiesta.
Esta boda nos dejó una bonita sesión con los habitantes más famosos de Castilla-La Mancha, los molinos, y con la preciosa luz del atardecer. Puedes comprobar por ti mismo que no mentimos a continuación.
Boda Natalia y Juande
Natalia y Juande son una pareja muy bien avenida porque tienen una línea de pensamientos muy parecida y unos planes de futuro ya bastante claros. Sacan lo mejor el uno del otro. Y, por supuesto, tenían claro que la boda iba a ser un gran día. Y así fue. Un día lleno de emociones, acompañadas por el calor típico de finales de julio.
Esta pareja entró al salón al compás de “Flying free” y con todos los invitados ondeando una especia de “espada láser” a su paso. Vamos, un auténtico torbellino de energía. La misma que deseamos que los acompañe el resto de
su vida juntos.
Antes de seguir con las fotos del gran día, os dejamos con unas palabras que Natalia dedicó a Juande: “Quiero que hagas los planes que te apetezcan, que sonrías mucho, que compartas cosas con tus amistades, que te pongas esa camiseta que odia todo el mundo si a ti te gusta. Que entre los dos decidamos a qué país viajar y que con una mochila pequeña nos sobre. Que descubras canciones conmigo. Y playas perdidas. Que aun sabiendo que puedes estar con cualquiera, prefieres comer pipas en un parque conmigo, en verano, hasta sabe Dios qué hora… Quiero que vivas, sobre todo, por ti, sin tener que morir por mí ni por nadie. Que ninguno pierda la guerra y luchemos los dos. Que no necesitemos fechas para acordarnos de todo. Y no quiero que seas de mi propiedad, pero ojalá tengas ganas de verme muchas veces y aparezcas, aunque no me avises. Que me beses, aunque no te lo pida y, sobre todo, que nos respetemos hasta que no nos queden ganas de querernos. Ojalá siempre…”
Esperamos que vuestro futuro sea tan brillante como los fuegos artificiales que
vimos en el día de vuestra boda.
El amor debe ser como el café. A veces fuerte, a veces dulce, a veces solo y otras acompañado. Pero nunca debe estar frío.